"Cuando aparece Montoneros muchos jóvenes estudiantes entran en la política a través de la simpatía que les despertaba esa organización. En ese momento la Juventud Peronista pasa a ser una herramienta política de Montoneros. 

Poco después, Montoneros empieza a hacer una cosa interesante que es construir un ala dentro del partido peronista. Es decir, más allá de la Juventud. Sin embargo, como no tenía cabida porque estaba la derecha peronista, crea el Partido Peronista Auténtico. Eso era 1974 o 1975. Aparece así con un formato legal, con afiliaciones en cada zona, etc.

Entonces, Montoneros nos pasa a los que ya habíamos cumplido 30 años de la Juventud al Partido Auténtico y nosotros empezamos a afiliar a otros compañeros de la JP y también a viejos peronistas.

Todas estas afiliaciones que tengo guardadas las hicimos con los compañeros en la zona de Chivilcoy. Yo las tenia que conservar hasta que juntara un cierto número, que no recuerdo, y después había que concentrarlas en la conducción del Partido Auténtico que estaba en la Zona Norte, en Buenos Aires.

Pero claro, después del 75, cuando Montoneros ataca el cuartel de Formosa, (que fue un desastre, un error gravísimo en democracia atacar un cuartel) Isabel declara ilegal al Partido Auténtico (porque todo el mundo ya sabía que respondía a Montoneros).

En ese momento yo decido guardar las fichas en mi casa. Pasa un mes, dos y aún en ese contexto los compañeros me reclamaban las fichas para concentrarlas en la sede central. Yo al compañero Lizaso, que era el encargado, lo veía cada 15 o 20 días y le decía que estaba juntando un poco más, que mientras que estuvieran en un pueblito de Chivilcoy era menos peligroso que si se las daba a él cerca de la Capital. Y las retuve por esa precaución. Si total el partido no estaba legal. Después esos compañeros cayeron todos en la sede central y no se qué habrá pasado con las fichas de afiliaciones que ya estaban ahí.

Las fichas en sí eran normales, como las de cualquier partido político, y se hacían por cuadruplicado. Cuando vino el golpe las metí con las otras cosas en el tarro lechero que enterré.

Ahora que ya desenterré el tarro tengo que ir a Chivilcoy para devolverlas a todos, si es que los encuentro".

* Testimonio de Oscar Vázquez registrado por Memoria Abierta el 20 de septiembre de 2010.